Viarava: la cervecería caroyense de pura cepa
Comenzaron hace casi 8 años como un desafío entre amigos y ahora producen entre 8 y 12 mil litros mensuales que comercializan en distintos puntos de la provincia de Córdoba. Con la sustentabilidad como una de sus banderas, esta empresa familiar está a punto de dar un nuevo salto de crecimiento.
Nacho Peschiutta fue el impulsor de lo que hoy es “Viarava”, una cervecería con identidad propia, que intenta atender los impulsos de sus clientes. “Nosotros tratamos de crear estilos de cerveza”, definió.
Hace casi 8 años, junto a un grupo de amigos, comenzó a experimentar en el mundo de la fabricación de cerveza artesanal. Después de un viaje a Bélgica, llegó con la clara idea de meterse de lleno en este mundo, que tiene tantas aristas como paladares.
Así, al calor de la amistad, nació Viarava, una empresa que hoy cuenta con una planta propia que produce entre 8 y 12 mil litros mensuales de cerveza de diversos tipos.
De a poco, pero con mucha convicción, Nacho se fue capacitando y comenzó a tomar más en serio el proyecto, al que luego se sumaron sus hermanos Ángelo y Luciano.
Así fueron armando la fábrica que hoy les está quedando chica y comenzaron a producir masivamente. Aunque primero intentaron entrar en el mercado de Córdoba Capital, después optaron por hacerse fuertes en nuestra zona.
Hoy venden en toda la región y son la cerveza más consumida en los bares locales, dado que se fueron adaptando al gusto de los consumidores.
A lo largo de estos casi 8 años, Viarava ya hizo al menos 30 tipos distintos de cerveza y los gustos, como cuenta uno de sus creadores, van cambiando. Está en ellos seguir esos gustos y crear pensando en el consumidor.
Por primera vez desde el comienzo, el mes de febrero fue complicado, dado que las ventas cayeron a la mitad debido a las medidas adoptadas por el presidente Javier Milei.
Pero, de todas maneras, Viarava ya está pensando en crecer y construir su propia planta en la quinta familiar, ubicada sobre calle 16 Sur, a tres lotes de la Av San Martín, que es la calle principal de la ciudad.
El proceso de maduración de cada estilo de cerveza varía entre 17 y 35 días, dependiendo el proceso químico necesario para llegar al sabor buscado.
Los propietarios d la firma tienen en claro que uno de los ejes sobre los cuales quieren trabajar es la sustentabilidad. Actualmente instalaron paneles solares que les brindan el 60 por ciento de la energía eléctrica que necesitan para producir.
Los residuos que derivan del proceso de fabricación son reutilizados como alimento para animales o como material recuperable.
Actualmente producen 14 variedades, con la particularidad de incorporar sabores de las frutas de la quinta propia, y en algunos casos haciendo un paso por barricas de roble embebidas en vino.
Otro toque distintivo también se lo da la utilización de agua mineral de Colonia Caroya
La mística
Viarava es un nombre que deriva de la lengua comechingona dado que antes de la conquista de América, se llamaba así al cordón serrano del Cerro Uritorco.
Por eso en las latas se pueden encontrar los personajes vinculados a esa zona y que son parte de la marca: los Comechingones, los Aliens, la Chamana, o formas y colores característicos de la región; cuentan historias reales y un poco místicas de lo que sucede en el norte y en las sierras de Córdoba.