¿ Vuelve a usarse el barbijo ?
Con el invierno aumentaron los casos de Gripe A, cuadros de COVID y virus respiratorios. Esto generó un interrogante; si reincorporar el barbijo en la rutina o no. El médico Martín Tauro reformuló la pregunta cuestionando la finalidad con que uno usa el barbijo: para no contagiar o para evitar contagiarse. De allí, explicó dos formas de aplicarlo, respetando conjuntamente otras alternativas preventivas para protegerse y proteger a los demás.
Ante el aumento de enfermedades respiratorias, es pregunta que estuvo circulando en muchos titulares.
Por eso, Noticias Jesús María consultó la opinión del médico generalista y Director del Geriátrico Municipal, Martín Tauro. El profesional explicó que la pandemia acercó un gran caudal de medidas preventivas, estrategias y sobre todo el uso del barbijo.
En esta época invernal, las cifras de enfermedades respiratorias y afecciones que conviven en conjunto, han causado dudas en cuanto a la reincorporación del barbijo en la rutina.
El médico respondió que la gente, en algunas ocasiones utiliza el barbijo por miedo a contagiar o a contagiarse. Por eso reformuló la pregunta cuestionando si la persona que va a usar el barbijo lo hace para no enfermarse o para no contagiar.
“Eduquemos e informemos porque de lo contrario usamos barbijo por una cuestión moral que por una cuestión científica y de salud”, meditó el médico.
El barbijo, es un método que sirve para evitar contagios. No obstante, es una alternativa más que funciona articuladamente junto a otras precauciones como el distanciamiento social, el lavado de manos, evitar lugares de exposición con cuadros complicados, etc.
Si no se aplican correctamente, estas medidas preventivas quedan “truncas” y no generan ningún cuidado. Por ello, Tauro recomendó utilizar el barbijo de dos maneras diferentes.
Si la persona no quiere contagiar porque se encuentra con síntomas respiratorios, deberá utilizar el barbijo colocando la parte celeste hacia adentro, y cubriendo nariz y boca. Es fundamental evitar tocarlo y en caso que se haya humedecido por las secreciones nasales, tendrá que ser desechado.
Si la persona no quiere contagiarse y se dirige a algún lugar público de exposición, tendrá que usar el barbijo colocando la parte blanca hacia adentro. Esto evitará que las partículas lleguen a la nariz y a la boca.
El médico insistió que el uso del barbijo debe ser aplicarlo correctamente con “coherencia y congruencia” para lograr resultados.
De la mano, explicó que además del barbijo, existen otros factores que se deben cumplir cuando uno se encuentra enfermo tales como el reposo, evitar automedicarse, eludir visitar atravesando cuadros contagiosos, no juntarse con grandes grupos por responsabilidad social, etc.
“En conclusión, tratemos de aprender todo y no solo una partecita que nos da tranquilidad moral”, finalizó el médico.