Colonia Caroya: Alejandra y sus tres hijos están durmiendo en la calle
Tanto ella como su hijo mayor trabajan y tuvieron que desalojar la casa que alquilaban. Aunque buscaron otras opciones, nadie quiere rentarles porque no tienen garantes. Esperan que el municipio les brinde alguna ayuda. “Nosotros podemos pagar, pero no contamos con alguien que sale de garantía”, afirmó la mujer, que anoche durmió en la Comisaría gracias a la solidaridad de los efectivos policiales.
Alejandra es de Santa Fe, pero hace al menos una década que vive en Colonia Caroya con sus cuatro hijos: Federico (28), Micaela (26) y Danisa (36), que tiene retraso madurativo. A ellos se sumó su nieta Ailín, de sólo 10 años.
Hace algunos días tuvieron que dejar la casa que alquilaban y se mudaron a un lugar que les prestaron, pero les pidieron que se fueran y quedaron literalmente en la calle.
Alejandra contó que, aunque buscaron lugares para alquilar, no encontraron a nadie que quisiera recibirlos porque no tienen quién les salga como garante.
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“En este momento estoy en situación de calle, somos cinco personas, una con discapacidad y una menor de edad”, relató la mujer con un nudo en la garganta.
Son personas trabajadoras, pero la mala fortuna los llevó a esta circunstancia tan dolorosa. El viernes y el sábado durmieron en la calle. Se refugiaron en la zona del Parque Guyón, pero la Policía se conmovió y ofreció que Alejandra y su hija con discapacidad pasaran la noche en la Comisaría.
Ella se mostró muy agradecida con los oficiales, que, sin tener la obligación, estuvieron dispuestos a ayudarla.
También acudió a la Municipalidad de Colonia Caroya y aún esperan respuesta de los trabajadores sociales. Quieren que, al menos, les sirvan como garantía para poder alquilar algún departamento.
Sus pertenencias quedaron en el terreno de un amigo en barrio La Florida y sólo se quedaron con frazadas y algunas pertenencias como para poder “acampar” donde los agarre la noche.
“No somos personas que estamos esperando que nos den las cosas”, afirmó Alejandra, que reiteró la necesidad de conseguir las garantías para poder alquilar.
Ella es empleada registrada como trabajadora de casas particulares y su hijo Federico trabaja en obras en construcción. Con eso subsisten como familia, pero lamentablemente hoy necesitan una mano.
Esta nota fue realizada en el parque de las calles 12 y 43, donde están pasando el domingo.
Afortunadamente, la pequeña Ailín, de 10 años, se está quedando momentáneamente en la casa de unos vecinos que la acogieron para que no duerma a la intemperie.
Para ellos es una situación “muy humillante” y por eso no aparecen en la foto. No están acostumbrados a este tipo de pesares.
Para colaborar
Alejandra: 3525-535403
Alias: federico27.95.mp
