Habló la operadora que intentaron apuñalar en Jesús María

El agresor le arrojó varios puntazos y ella pudo zafarse defendiéndose a patadas. Mientras intentaba llamar a la Policía el joven le quitó el celular y se lo destruyó en el piso. “Los voy a matar a todos”, los había amenazado minutos antes. Desde la Policía les respondieron que “no le dieran bola”.

En un hecho de altísima gravedad, un joven de 20 años arribó a la sede de Remises América y comenzó a amenazar a la operadora que estaba a cargo del lugar.
Con una navaja en la mano irrumpió y le tiró varios puntazos, pero la empleada pudo repeler el ataque a patadas, con la ayuda del dueño de la Remisería, Pablo Castellanos, que también comenzó a forcejear con el agresor.
En una entrevista exclusiva, la mujer contó que momentos antes el malviviente había ingresado al local preguntando por un remisero con el que había tenido un altercado. Al no encontrarlo, se encarnizó con la víctima, que llamó a la Policía, pero no tuvo respuesta inmediata.
Unos minutos después de esa primera visita inesperada, sonó el teléfono de la Remisería y del otro lado una mujer, llorando, advirtió que su novio iba hacia el lugar con una navaja.
No había alcanzado a colgar el teléfono cuando reapareció el mismo sujeto, esta vez con un arma blanca. Entró sin demorarse y se fue directo hacia la operadora, a quien le arrojó un primer puntazo.
“Lo alejé con la pierna, con una patada”, relató, todavía compungida la víctima de este brutal episodio.
Allí el agresor comenzó a forcejear con el dueño de la remisería, que intentaba reducirlo infructuosamente. Ella fue corriendo hasta el remis que estaba en la puerta para pedir apoyo por la radio, pero no logró hacerlo.
El malviviente pudo zafarse y fue directo a atacarla de nuevo, esta vez ya en la parte externa del local, pero la joven nuevamente lo hizo retroceder de una patada. Allí los dos hombres siguieron forcejeando mientras ella pudo entrar y llamar a sus compañeros, que de inmediato dieron aviso al 911.
Cabe destacar que, en el segundo ataque, el agresor le arrebató el celular a la operadora y lo destruyó contra el piso.
Finalmente llegaron los primeros efectivos de la Departamental Colón y detuvieron al sujeto, que claramente se encontraba fuera de sí.
“Para mí fue un intento de homicidio”, afirmó la víctima, que tuvo que contratar un abogado, ya que teme por su integridad física.