Dolor y pedido de justicia por la muerte de Emanuel: su familia cree que fue atropellado y que el responsable huyó
Su hermana melliza y su madre rompieron el silencio en una entrevista radial. Sospechan que un auto estuvo involucrado en el siniestro vial del 23 de marzo sobre Ruta 9 Norte. Denuncian irregularidades en la investigación.

El pasado 23 de marzo, Emanuel falleció en un confuso siniestro vial ocurrido sobre Ruta 9 Norte, a la altura del ingreso a barrio Sierras y Parques, en Jesús María. A casi un mes del hecho, su familia exige justicia y sostiene que hay elementos que indicarían la participación de un vehículo que se dio a la fuga.

Analuz, hermana melliza del joven fallecido, y Adelaida Altamiranda, su madre, hablaron por primera vez al aire de Radio Jesús María y compartieron el profundo dolor que atraviesan, además de su descontento con el accionar policial en las primeras horas de la investigación.
“Fue devastador enterarnos”, expresó Analuz, visiblemente conmovida. La joven contó que desde el principio notaron irregularidades en torno a lo sucedido y comenzaron por sus propios medios a buscar cámaras de seguridad y testigos en la zona del accidente.
Gracias a publicaciones en redes sociales, un usuario les escribió asegurando haber visto un vehículo posiblemente implicado en el hecho. Según Analuz, esta información nunca fue investigada en profundidad por las autoridades. “A Ema lo chocaron, a Ema lo mataron”, afirmó con contundencia.
El testimonio más desgarrador fue el de Adelaida, madre de Emanuel, quien se encontraba internada en terapia intensiva cuando ocurrió la tragedia. Se enteró de la muerte de su hijo una semana después. “No pude despedirme. Solo quiero saber quién lo chocó, mirar a esa persona a los ojos y preguntarle por qué lo dejó tirado”, dijo entre lágrimas.
“Estamos tratando de que esto no quede en la nada. Pedimos justicia por Ema. Que pague quien tenga que pagar”, agregó Analuz, visiblemente quebrada.
La familia continúa pidiendo colaboración de posibles testigos y reclama que la investigación avance. Mientras tanto, su dolor permanece intacto y la herida abierta por la falta de respuestas.