La Granja: concejales oficialistas rechazaron crear un sitio de la memoria
A través de un comunicado, las entidades que habían solicitado esto al municipio tildaron esto como “un acto de negacionismo por parte del gobierno municipal”.
Una fuerte polémica atraviesa por estos días la localidad serrana de La Granja, donde un grupo de organizaciones que defienden los derechos humanos, solicitaron a las autoridades municipales la posibilidad de crear un sitio de la memoria, en el marco del aniversario número 48 del siniestro golpe militar que arrasó a la Argentina desde 1976.
Lo primero que hicieron es solicitar, a mediados de febrero, una audiencia con el intendente Miguel Píttaro, de Juntos por el Cambio, con copia al Concejo Deliberante de la ciudad. Esa nota llevaba la firma de más de cien vecinos de La Granja, pero nunca recibió respuesta.
Al no tener ningún tipo de devolución, las agrupaciones pidieron plantar un árbol como forma simbólica de recordar el aniversario del golpe, algo que definitivamente les fue negado.
De todas maneras, el 24 de Marzo, unas 80 personas participaron del acto en el que se conmemoró la fecha que nos interpela sobre la memoria, la verdad y la justicia.
Días después, el martes 26, el Concejo Deliberante convocó a algunos referentes de las agrupaciones que estaban bregando por un sitio de la memoria en el pueblo, y les permitieron participar de una reunión de comisión.
En ese encuentro los ediles pusieron en debate la posibilidad de darle curso en el pleno de sesiones a esta iniciativa, pero el oficialismo se negó a hacerlo, sin brindar, al menos en ese momento, los argumentos pertinentes.
Esto generó el enojo de algunos representantes de las entidades de derechos humanos, y se retiraron del lugar.
A través de un comunicado de prensa, aseguraron que el oficialismo de Juntos por el Cambio se opuso a la creación del sitio de la memoria por el solo hecho de “no querer”.
Es por eso que esta actitud, que de alguna manera va de la mano con el gobierno libertario de Javier Milei, fue calificada como “un acto de negacionismo” por parte del gobierno municipal.