Dalila: la bombera de Jesús María que viajó al derrumbe en Villa Gesell como rescatista
Dalila Colella es una joven bombera de 23 años que ingresó al cuartel de Jesús María con el sueño de ayudar al otro. Tomó la decisión de unirse a la Brigada USAR ARG-10 para asistir a los operativos de rescate en el hotel que se derrumbó en Villa Gesell.
Durante la madrugada del marte 29 de octubre, un terrible siniestro conmocionó a todo el país. Se trata del derrumbe del Hotel “Dubrovnik”, ubicado en la ciudad de Villa Gesell. La estructura del edificio se desplomó por completo, arrasando con diez pisos en el que quedaron atrapadas varias personas.
Rescatistas de diferentes puntos auxiliaron con operativos de rescate. Cerca de 300 bomberos trabajaron sin censar ante el catastrófico siniestro que dejó tres muertos y cinco desaparecidos.
La historia de Dalila Colella, Bombera del Cuartel de Jesús María comienza aquí. Se encontraba capacitándose un sábado al mes en la Brigada USAR ARG-10 con bomberos de diferentes puntos de la provincia.
Dalila contó que justamente este año “se vencía la acreditación” de la brigada, por lo que no iban a finalizar el curso sin “una salida real”. Si bien, jamás esperó ser parte de un operativo de un hecho tan trágico, se sintió agradecida con Dios por haber tenido la oportunidad.
Luego del derrumbe ingresó un aviso al grupo de Whatsapp de la brigada, solicitando bomberos disponibles para formar parte de dichos operativos. Dalila, no dudo en postularse, luego de solicitar el permiso al cuartel de Jesús María.
Contó que debió presentar una extensa documentación relacionada al seguro de vida, ficha médica y otros archivos importantes.
El viaje hacia Villa Gesell le llevó un día completo, y una vez en el lugar, participó en los operativos de rescate por tres días consecutivos.
Durante el primer día realizó tareas de escombramiento. Se pasaban los restos de edificio entre todos llenando baldes para buscar a personas perdidas.
A pesar que fue una hecho trágico para muchas familias, Dalila expresó que fue gratificante trabajar con un grupo tan comprometido por salvar vidas.
Recordó que durante el operativo no estaba permitido llevar el celular, ni filmar. Solo dedicaban esas horas para buscar a personas.
Los brigaditas que acudieron al siniestro formaron tres grupos diferentes con cuatro horas de operativo cada uno. Al turnarse, Dalila disponía de ocho horas de descanso para refugiarse en un campamento con cocina, baños y camas.
Dalila es una jovencita de 23 años que vive en Jesús María y decidió apuntarse como aspirante porque “toda su vida sintió la necesidad de ayudar al prójimo”.
A pesar de ser una niña que soñaba con ser bombera, algunos le dijeron que al no ser remunerado “no es una profesión”.
Insistió en su sueño e ingresó al cuartel de Jesús María en el 2022, mismo año en el que se egreso de profesora de Educación Física.
“Hoy en día recibida puedo decir que si es una profesión, no remunerada, pero una profesión porque tenés que capacitarte mucho”, manifestó.
Luego de dos años de capacitación logró asumir como aspirante, para luego pasar a ser parte del cuerpo activo de bomberos.
Dalila contó que “es difícil salir del trabajo” para poder asistir a los operativos. En su caso contó que sus patrones son “flexibles” pero que muchas veces es una situación complicada que afecta a muchos bomberos.
Aprovechó para invitar a otros jóvenes a formar parte de una profesión que además de salvar vidas, es un orgullo para quién la práctica.