El encargado del Operativo Vital, Marcelo Cingolani reveló el amplio trabajo que realizan enfermeros y paramédicos en los accidentes de las jineteadas y de la vía pública del Festival.

Cuando somos testigos de jineteadas con caídas, se puede observar que una ambulancia se dirige al campo para llevarse al herido. ¿Pero qué sucede después?.
El encargado del Operativo Vital, Marcelo Cingolani contó que detrás, hay un trabajo “amplio” articulado con el Dr. gaucho López, enfermeros y paramédicos.
Principalmente, una ambulancia con tres profesionales de la salud, se dirigen al campo para extraer al paciente en cuestión. Luego se le realiza un relevamiento en donde se analiza si padece de traumatismos leves, graves o heridas cortantes.
En total, el sector sanitario se compone de un equipo de más de 30 personas, que se turna para cubrir las jineteadas.
Según el estado del jinete, éstos pueden ser derivados al Hospital Regional Vicente Agüero o a Córdoba, según la gravedad de cada uno.
Los médicos del festival son emergentologos que principalmente, se dedican a socorrer al jinete, luego del accidente.
Durante las últimas noches festivaleras, Marcelo confirmó que las lesiones van evolucionado a medida que llegan los últimos días.

Hasta el momento han realizado dos trasladados de traumatismo por noche.
Este año se implementaron cambios (el campo de arena), para resguardar la seguridad del jinete.
Marcelo confirmó que este cambio implicó una evolución favorable respecto a los golpes que sufren los jinetes.
El equipo sanitario, además cubre la parte externa del Festival. Están atentos ante cualquier accidente que pueda ocurrir en la vía pública. 
Paramédicos de la Universidad Nacional de Córdoba, Defensa Civil de Jesús María y Bomberos Voluntarios de Jesús María junto al Hospital Móvil, son los encargados de la seguridad de los espectadores.

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